La semana pasada, Estados Unidos envió en secreto un nuevo sistema de misiles de largo alcance a Ucrania, y las fuerzas ucranianas utilizaron inmediatamente las armas para atacar un aeródromo militar ruso en Crimea el miércoles pasado y a tropas rusas en el sureste del país durante la noche del martes, según un alto funcionario de EE. UU.
Estados Unidos suministró anteriormente a Ucrania una versión del Sistema de Misiles Tácticos del Ejército —conocido como ATACMS, por su sigla en inglés— armada con municiones de racimo de amplio alcance que pueden viajar 160 kilómetros.
Pero Ucrania ha codiciado durante mucho tiempo la versión de mayor alcance del sistema, con un rango de unos 305 kilómetros. De este modo puede alcanzar zonas más al interior de la Ucrania ocupada, incluida Crimea, centro neurálgico de las fuerzas aéreas y terrestres rusas, y otros nodos de abastecimiento para las fuerzas de Moscú en el sureste del país.
El martes por la noche, Ucrania utilizó los misiles de mayor alcance para atacar a las tropas rusas en la ciudad portuaria de Berdiansk, en el mar de Azov, dijo un alto funcionario de EE. UU., hablando bajo condición de anonimato para discutir asuntos operacionales.
El miércoles pasado, las cuentas de los medios sociales en Ucrania informaron de grandes incendios y explosiones en un aeródromo militar en Dzhankoi, Crimea, que el alto funcionario del gobierno dijo que también era un objetivo del ATACMS de largo alcance. En un discurso pronunciado esa misma noche, el presidente Volodímir Zelenski dio las gracias al general Oleksandr Syrsky, máximo comandante ucraniano, pero no dio más detalles sobre el ataque.
